Nadie supo por qué Elías decidió volver a pie. Desde el norte del continente, más de mil kilómetros lo separaban de su casa. Algunos dijeron que había perdido el tren, otros que había perdido algo más profundo, algo que solo podía encontrarse con los pies sobre la tierra y el alma abierta. El primer día…
No supo si fue el reflejo del sol en su cabello, la manera en que sostenía el libro entre las manos o la forma en que, sin mirarlo directamente, parecía haberlo estado esperando toda la vida. Ella estaba sentada en el banco azul del parque, ese que siempre estaba vacío. Él solo pasaba por ahí…